En busca de pinos y vacas...
La naturaleza, en perfecta combinación con la generosidad y dedicación de ser humano, favorece el desarrollo de enormes bosques con exuberantes pinos dotando a la comarca de una identidad geográfica y una bella personalidad de un valor ecológico extraordinario.
El Comunero de Revenga es un magnífico centro turístico para el deleite de amantes de la naturaleza.
Posee un área de descanso con barbacoas para disfrutar de un maravilloso día con la familia y los amigos.
Por sus senderos se pueden hacer rutas con juegos, a distintas alturas, entre los arboles del bosque, todo perfectamente supervisado por monitores y con unos espectadores de excepción... las vacas.
La casa de la madera está considerada Patrimonio Natural.
Es un logro arquitectónico construido sólo y exclusivamente de madera y se integra a la perfección en e entorno natural del bosque.
En el centro de los grandes espacios del interior de éste "museo de madera" se encuentra un ascensor acristalado que nos eleva, en un viaje de verdes sensaciones, por encima de las copas de los árboles y una vez arriba encontraremos una pasarela que nos adentrará hasta las entrañas del bosque de pinares, impregnándonos de olores naturales y una bella sinfonía de colores...
Es como ir directos al cielo con los pies en la tierra.
